Miguel Ángel Guerrero Arriaga
Septiembre 24, 2020
Sin duda alguna durante los últimos seis meses, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha dado probadas muestras de ser un experto constructor de cortinas de humo para desviar la atención de los mexicanos de los reales grandes problemas que aquejan al país.
Lo ha hecho, aprovechando cualquier circunstancia o hechos que se presentan para utilizarlos como efectivos distractores de la opinión pública de esa actitud tanto como de las fallas de su administración.
Esa capacidad de AMLO empezó a evidenciarse hace seis meses con la aparición de la pandemia del coronavirus en territorio nacional de la que estar hablando de su evolución en otros países perdió un tiempo valioso en el inicio de su atención lo que impidió el arranque de grandes cantidades de contagios y la aplicación de las estrategias sanitarias para evitar su rápida propagación de tal suerte que convirtió en un foro de exposición mediática diaria la conferencia sobre su evolución.
Luego usaría como cortina de humo la captura del ex director de Pemex Emilio Lozoya y sus denuncias sobre corrupción de ex funcionarios que poco han servido para hacer justicia.
Enseguida vendría la cortina de humo estrella como fue la rifa del avión presidencial sin avión con la que se mantuvo en el centro de la atención nacional y poco espacio dejó para que se vieran abiertamente sus fallas en la contención de la pandemia y en la reactivación de la caída economía.
Poco después, se montó en la publicación de un desplegado firmado por intelectuales y pensadores exigiéndole ”esto tiene que parar” en alusión al desplome del país con cuyos firmantes abrió una confrontación que no se ha apagado y le sigue sirviendo para atraer reflectores.
Desde luego, la figura presidencial no desperdició la oportunidad de usar para sus fines distractores el plantón de FRENA en el centro de la CDMX que ya está en el zócalo de la capital del país.
Previsor como es en asuntos que lo alejen de las miradas críticas ya está preparando su próxima nueva cortina de humo como se visualiza el tema de la posible consulta para enjuiciar a los ex presidentes, Salinas, Calderón y Peña Nieto a lo que empezará a sacarle jugo la semana entrante cuando la SCJN dictamine si puede realizarse o no a lo que llegará después de explotar mediáticamente su pleito con algunos gobernadores que le exigen mayores participaciones federales.
Es de esperar que AMLO más adelante siga exhibiendo su capacidad probada en la construcción de las mencionadas cortinas de humo con las que pretende evitar que los mexicanos pongan la vista en las partes de su gobierno que empiezan a hacer agua, sea por Dios.
