Miguel Ángel Guerrero Arriaga
Febrero 03, 2020
Como ya lo hemos apuntado en este espacio, mientras los aspirantes gubernamentales del PAN andan en una poco disimulado intensa campaña de autopromoción de sus posibilidades de alcanzar la candidatura al gobierno estatal del 2021, al igual que los de Morena entre los que el que parece el más fuerte como se considera a Esteban Moctezuma Barragán, al parecer ya hasta casa compró en la capital potosina por aquello de la necesidad de medio cubrir el requisito de la residencia para poder ser candidato y otros como Primo Dothé con optimismo desbocado ya anda prometiendo chambas a los cuates de la huasteca para cuando, según, dice, sea gobernador algunos identificados con este partido como Juan Ramiro Robledo, deja que sus amigos y colegas sean los que hablen sobre sus capacidades y las ventajas que atraería al partido en caso de llegar a la candidatura.
En lo que toca a los aspirantes del PRI quizás por temor a moverse antes y no salir en la foto como decía al mítico cetemista Fidel Velázquez se mantienen bajo una férrea inmovilidad y un absoluto silencio.
Varios de ellos actualmente funcionarios estatales se entiende que no hablan públicamente sobre el tema por miedo a causar el disgusto de su jefe el gobernador Juan Manuel Carreras luego de que recientemente declaró que si algunos de sus colaboradores abrigan la intención de buscar un cargo de elección lo mejor es que renuncien a los puestos que tienen lo que, de atender en esos términos, los dejaría fuera de la nómina de aquí al 2021 con el peligro de no recibir siquiera el siempre jugoso bono de marcha al concluir el sexenio.
No obstante tienen la ventaja a su favor de que por su trabajo son objeto de una constante atención mediática que los mantiene presentes en la mente de los electores lo que obtienen sin buscarla como es el caso del secretario general de gobierno Alejandro Leal Tovías cuya opinión siempre es requerida sobre cualquier asunto o el mismo titular de la SEGE Joel Ramírez Díaz inmerso en un interminable trajín por todo el estado atendiendo todas las cuestiones y necesidades que plantean las actividades educativas de la entidad aunque, como es evidente, se cuidan de no violar la normatividad electoral toda vez que en sus expresiones ante los medios se abstienen de no tocar el tema electoral.
Pero si llama la atención que contra la actitud en épocas pasadas de los aspirantes gubernamentales del tricolor en la previa al 2021 guarden un inexpugnable silencio y eviten participar en actos que pueden acarrearles simpatizantes lo que bien habla del fuerte control que ejerce JMCL sobre quienes sueñan con relevarlo y de que no le alteren las aguas electorales con tanta anticipación.