Crispa Trump al mundo y deja a Sheinbaum colgada de la brocha.

Toño Martínez

No cabe duda que los caminos de la vida son inescrutables, como misterioso el cruce de circunstancias propiciadas o exógenas que alteran la búsqueda de soluciones a problemáticas particulares que afectan a millones de personas, a futuros de incertidumbre.

A esos extraños e imprevisibles fenómenos se está enfrentando en este momento la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo luego de que tras haber concretado con fecha, agenda y lugar la primera entrevista cara a cara con el mandatario de Estados Unidos Donald Trump en el marco de la reunión del G7 en Canadá, donde abordaría asuntos delicados para la República como son los aranceles a exportaciones, deportación masiva de migrantes ilegales, impuesto a las remesas y alteraciones del Trato de Libre Comercio, además del de narcotráfico, este cancelara abruptamente la entrevista para concentrarse en atender el conflicto bélico entre Israel e Irán que puede detonar una guerra a gran escala.

Dejó Turno a Claudia cómo se dice en el argot de barrio «colgada de la brocha» y eso no es nada bueno para nuestro país afectado por las consecuencias de la política de Donald Trump en economía, inversión, empleo y crecimiento.

De ninguna manera podemos criticar y mucho menos festinar el shock por el cambio inesperado en la plática con Trump que altera los planes de Sheinbaum porque sería como darnos un tiro en el pie.

En estos momentos no cuentan las diferencias políticas ni ideológicas cuando está en juego la estabilidad y soberanía del país; tampoco se valen las actitudes narcisistas de Claudia y corifeos descerebrados que «ven la burra reparar y no le arrojan el sombrero» porque siguen con actitudes provocativas y el «no somos iguales», tomando decisiones irritables y populistas que encanijan al ciudadano.

Las cosas van de mal en peor en todo lo que lastima a las familias como la carestía de toda clase de productos, hasta los de la canasta básica, la violencia que se extiende como plaga devoradora y pésimos servicios de salud pública.

Buscar salidas requiere de unidad de todas las partes pero que la 4T de el primer paso y ya deje el “chachalaqueo” de que la respaldan 35 millones para hacer lo que quiera cuando ya no es así;Primero 35 millones no son 100 y segundo el descontón que le dieron con la dichosa elección judicial debe hacerles bajar de la nube.

El respaldo de todos a Claudia para que con buenos oficios y diplomacia sin populismo encuentre los caminos para lograr acuerdos con Donald Trump no deberá utilizarse para seguir montada en su macho de que cualquier logro es por la 4T. No se le olvide que este no es un reino monárquico sino una nación libre y democrática de a deveras no de espejismo como la que manejan.