En el HRAE, se han brindado 23 atenciones en consulta externa y 42 hospitalizaciones por esta causa en lo que va del año.
La trombosis es la formación de coágulos en el interior de los vasos sanguíneos, los cuales pueden bloquear el flujo normal de sangre.
La conmemoración del Día Mundial de la Trombosis, es celebrada cada 13 de octubre con el objetivo de sensibilizar a la población sobre los riesgos que representan los coágulos sanguíneos en la salud. Esta fecha coincide con el nacimiento de Rudolf Virchow, médico alemán que acuñó el concepto de trombosis y sentó las bases para su comprensión moderna.
Los Servicios de Salud del Estado y la Coordinación Estatal IMSS Bienestar de San Luis Potosí a través del Hospital Regional de Alta Especialidad “Dr. Ignacio Morones Prieto”, se suman a generar conciencia y sensibilización sobre esta condición potencialmente mortal. En lo que va del año, en el HRAE “Dr. Ignacio Morones Prieto” se han brindado 23 atenciones en consulta externa y se han registrado 42 hospitalizaciones por esta causa, lo que subraya la importancia de detectar a tiempo esta condición para evitar consecuencias graves o incluso mortales.
La trombosis es la formación de coágulos en el interior de los vasos sanguíneos, los cuales pueden bloquear el flujo normal de sangre. Cuando se presenta en las venas profundas, especialmente de las piernas, se denomina trombosis venosa profunda (TVP), y si el coágulo se desprende y viaja hasta los pulmones puede causar una embolia pulmonar, una emergencia médica de alto riesgo.
Entre los factores de riesgo destacan la inmovilidad prolongada (como viajes largos o reposo postoperatorio), cirugías recientes, embarazo, uso de anticonceptivos orales, antecedentes familiares de coágulos, obesidad, tabaquismo y algunas enfermedades crónicas como el cáncer. También pueden presentarse casos en personas aparentemente sanas, por lo que es fundamental conocer las señales de alerta.
Algunos signos que pueden indicar la presencia de una trombosis venosa profunda son hinchazón repentina en una pierna, dolor o sensibilidad, enrojecimiento y sensación de calor en la zona afectada. En el caso de una embolia pulmonar, los síntomas incluyen dificultad para respirar, dolor en el pecho, tos con sangre y taquicardia. Ante cualquiera de estas manifestaciones, se debe acudir de inmediato a un servicio médico.
La prevención es posible mediante hábitos saludables como mantenerse activo, hidratarse adecuadamente, evitar el sedentarismo prolongado, y en pacientes con alto riesgo, seguir las indicaciones médicas para el uso de medicamentos anticoagulantes o medias de compresión.