El clamor popular, lo que el pueblo piensa

Filiberto Juárez Córdoba

Julio 05, 2025

LA NOTICIA fue muy difundida en redes sociales. Un hombre fue a un motel, bien acompañado por supuesto, y al retirarse se llevó de recuerdo una pantalla. En un video de las cámaras de seguridad, que circuló viralmente en redes sociales, aparece cargando el aparato por lo que pudo ser identificado, tanto que ahora se sabe que es militante priista. Fuentes priístas hicieron trascender que ese individuo si llegó a participar en su partido, pero eso fue hace mucho, que de hecho ya ni lo consideran priísta. Hay quienes dicen que hay fotografías que dejan ver lo contrario y se asegura que en las listas del CEEPAC aparece registrado como integrante del Consejo Político Estatal. Es decir sigue siendo militante y presuntamente cercano a la dirigencia. Personas más imparciales dicen que lo que hizo es responsabilidad personal y nada tiene que ver con el partido al que pertenece ni a la profesión que tenga ni con otras implicaciones. En lo que respecta a que si es todavía priista o ya no, también dicen que es muy relativo, porque luego hay quienes participan ahí no por convicción, si no por conveniencia, son priistas de pura pantalla pues, y con los antecedentes recientes ni modo que digan que el autor del robo al motel no entra en esa categoría, su militancia es de pantalla.

MUY DISGUSTADO por las evaluaciones de Congreso Calificado a la legislatura local, el diputado Carlos Arreola, manifestó que “es absurdo medir el trabajo legislativo con fórmulas que no consideran el contexto ni las atribuciones reales de las comisiones. Lo que sí vale es lo que piensa el pueblo, y el pueblo ya eligió el modelo que representa la Cuarta Transformación”. Quién sabe si él conoce las atribuciones reales de un diputado y el contexto en que debe desempeñar sus funciones. Por otra parte, debería explicar qué tiene que ver el modelo de la Cuarta Transformación, con la evaluación de los integrantes de una legislatura local. Lo de que el pueblo eligió ese modelo y lo que piensa el pueblo es lo que cuenta, habrá que ver lo que realmente piensa la gente, lo que dice el llamado clamor popular.

EL CLAMOR POPULAR era un concepto muy invocado por los políticos, que se esforzaban por asegurar que ellos si escuchaban a la ciudadanía y atendían lo que anhelaban y expresaban a través de sus expresiones públicas, del clamor popular. Se cuenta que en una ocasión, una persona que había trabajado en una campaña y esperaba que el quien fue candidato, en ese momento ya gobernante, cumpliera sus promesas, sobre todo la que le había hecho a él, de darle una buena posición, empleo bien pagado y algunos privilegios, buscó una oportunidad para tratarle su pendiente. “Jefe”, dicen que le dijo muy serio, “ya llevamos casi un año de su período y aún me tiene en espera, yo cumplí apoyándolo, ahora espero, como me prometió que haría cuando ganáramos, me apoye a mí con lo que quedamos”. “En esas ando”, le contestó el jefe supremo, “dame un poco de tiempo para ver dónde te acomodo”. “¿Cuánto tiempo? Espero que no sea mucho porque ya ando desesperado, al grado de que si no me resuelve, a pesar del afecto y lealtad que le tengo, me voy a tener que unir al clamor popular”. “Va a ser pronto, tenme confianza, ¿pero cómo está eso de que te vas a unir al clamor popular, a pesar de la lealtad que me tienes? ¿Pues qué dice el clamor popular?”. “Que es usted un reverendo hijo de la fregada, que se aprovecha de todos y no cumple sus compromisos”. Lo que vale, entonces, es lo que el pueblo piensa y dice, esperemos que Carlos Arreola, averigüe que dice el clamor popular con respecto a los diputados locales.

CIUDADANOS OBSERVANDO, denunció que los dirigentes del PRI al mismo tiempo que cobran sueldo como funcionarios partidistas son proveedores o prestadores de servicios al partido, se pagan a ellos mismos pues. Qué pensará la militancia, comentó alguien. Cuál militancia, si ya no les queda nada, le respondieron, sin embargo las cosas están plenamente justificadas, como ya expulsaron los pocos que les quedaban y nadie quiere tratos con los priístas, no les ha quedado más remedio que hacer los negocios entre ellos.

UNA CUADRILLA de Protección Civil Municipal, pretendiendo cumplir con sus funciones, en pleno centro de Ciudad Valles, incineró un enjambre de abejas. Obviamente esto provocó indignación y se preparan demandas por parte de la organización Selva Teenek. En realidad se cometió un grave delito y la acción fue un crimen contra una especie protegida e imprescindible para el equilibrio ecológico del mundo. NOSOTROS DECIMOS:

Por esos torpes manejos

Surgieron indignadas quejas,

Por quemar a las abejas,

Quemen a esos… de ProtecciónCivil

adiestraysiniestra_3@hotmail.com

adiestraysiniestra@yahoo.com.mx

X @FJuarezC