Episcopado mexicano se suma a contingencia por coronavirus

Miguel Ángel Guerrero Arriaga

Marzo 20, 2020

Sin haber un decreto presidencial que lesione el patrimonio de la iglesia ni acote o acorte el culto público de sus ministros, por voluntad propia la jerarquía católica decidió suspender sus actos religiosos con el fin de solidarizarse con las medidas encaminadas a frenar la propagación del covid19, incluyendo la celebración de las misas católicas dominicales sin haber sido obligada por el gobierno como ocurrió en 1926 con la entrada en vigor del decreto promulgado por el entonces presidente Plutarco Elías Calles lo que desató la guerra cristera también llamada cristiada de lo que, afortunadamente no se ve que haya riesgo de repetirse pues la suspensión de sus actos religiosos no fue por imposición del gobierno, ni sus bienes patrimoniales son amenazados.

Como era de esperarse y ya es sabido, el Episcopado Mexicano anunció por estos días la decisión de suspender todo acto religioso masivo que pudiera significar un peligro de propagación del coronavirus en todos los templos católicos del país por lo que ya no se celebrarán misas, bodas, confirmaciones y es seguro que ni misas de difuntos en virtud de que los asistentes corren el riesgo de contagiarse y ser foco de propagación posteriormente.

Lo que llama la atención y es digna de reconocerse es la actitud solidaria de la iglesia siempre reacia a dejar de practicar el culto público sin presiones oficiales de por medio o amenazas a su estructura, no, ahora lo suspendió voluntariamente sin protestar ni ponerse en rebelión como lo hizo ante el decreto de Elías Calles aquel año citado dando lugar a la guerra cristera que costó algo así como 250 mil vidas pues se obligaba a los sacerdotes a inscribirse en un control oficial como practicantes del culto y la asistencia a las misas se limitaba a un reducido número de fieles asistentes, además de que se modificaban las condiciones del patrimonio económico y físico de la iglesia para disgusto de la jerarquía por la disminución del poder e influencia que todo eso le acarreaba.

Sin embargo, decíamos esta ocasión la iglesia ha asumido su papel de estar en favor de la grey a no convertirse en posible centro de infección en sus actos religiosos pues, además puso el ejemplo para que agrupaciones de otras religiones como los testigos de Jehová y los cristianos se sumaran a la suspensión de su culto público con actos masivos con lo que, sin duda todas contribuirán a evitar que se presenten nuevos casos positivos de COVID 19, alabado sea el Señor.

CABOS SUELTOS

Afortunadamente, lo desierta que se muestra la ciudad por estos días es fiel reflejo de la atención que han puesto los potosinos al llamado de quedarse en casa, incluyendo los restaurantes “fifí” cuya clientela es la que normalmente se pasa por el arco del triunfo esos llamados o las disposiciones oficiales.

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