Dr. Victorino Oliva.
Está es una pregunta que mucha gente se hace y con facilidad encuentran infinidad de teorías sobre hierbas o cocimientos que «curan» este problema de salud.
Para fines prácticos se consideran 3 tipos de diabetes.
A.- Diabetes 1 o insulinodependiente; anteriormente conocida como diabetes juvenil.
B.- Diabetes 2 o diabetes mellitus.
C.- Diabetes gestacional.
El mayor crecimiento porcentual está en la diabetes 2, que en México ha logrado afectar ya al 14% de la población.
Este tipo de diabetes se caracteriza por elevación excesiva de la glucosa presente en la sangre como consecuencia de mayor consumo de carbohidratos, ya sean azúcares o almidones.
El inicio se conoce como «resistencia a la insulina» es decir, la membrana celular no permite que entre más glucosa al interior de la célula, lo que origina un incremento en la producción de insulina.
Esta hormona favorece la formación de grasas (colesterol y triglicéridos) a partir de los excedentes de glucosa para evitar que nuestro organismo se dañe por el efecto que causa esta «azúcar» circulante.
Usar medicamentos debería ser el último recurso utilizado, ya que el objetivo primero debe ser corregir la causa que que la origina y que obviamente es el tipo y la cantidad de los alimentos ingeridos.
Gastar más energía realizando mayor trabajo físico o intelectual contribuye también a limitar los niveles altos de glucosa en nuestra sangre y con esto se consigue evitar sustancialmente las consecuencias que de ella se derivan.
La respuesta final es que sí se puede vivir sin diabetes (tipo 2), todo consiste en cambiar hábitos, tanto alimenticios como de actividad.
Y para lograrlo es indispensable la disciplina; en este y en cualquier otro objetivo que se pretenda alcanzar.
