· La calidad de las relaciones interpersonales influye directamente en el manejo del estrés, el estado de ánimo, la autoestima y la prevención de trastornos mentales.
La convivencia saludable es un elemento fundamental para el bienestar mental y emocional de las personas, consiste en la interacción respetuosa y armónica con quienes nos rodean, promoviendo ambientes seguros, de apoyo y libres de violencia. Es importante tomar en cuenta que la calidad de las relaciones interpersonales influye directamente en el manejo del estrés, el estado de ánimo, la autoestima y la prevención de trastornos mentales, por ello es que la convivencia positiva facilita el desarrollo de habilidades sociales, favorece la resolución pacífica de conflictos y contribuye al fortalecimiento del sentido de pertenencia.
Lo anterior lo dio a conocer la psicóloga Verónica Yazmín Gómez Hernández, Responsable Estatal de Capacitación en Salud Mental y Adicciones, y Coaliciones o Redes Comunitarias. Puntualizó que existen diversos factores que influyen en una buena convivencia, los cuales pueden convertirse en protectores de la salud mental cuando se fomentan de manera constante, por ejemplo:
1. Comunicación asertiva, consiste en expresar pensamientos y emociones de manera clara, respetuosa y directa ayuda a prevenir malentendidos, favorecer acuerdos y fortalecer los vínculos.
2. Escuchar activamente y validar las emociones del otro fortalece la confianza y favorece la empatía.
3. El respeto mutuo, incentiva a reconocer el valor, las necesidades y los límites de las demás personas es esencial para la armonía social, además promueve relaciones equitativas y seguras, previniendo dinámicas negativas como el hostigamiento o la violencia.
4. La cooperación y apoyo permite colaborar en actividades cotidianas, trabajar en equipo y brindar ayuda cuando alguien lo necesita genera confianza y fortalece la red de apoyo social, esta red es un factor clave para enfrentar momentos difíciles y proteger la salud emocional.
5. Tiempo de calidad que contribuye al compartir actividades agradables con la familia, amistades o comunidad favorece la unión y genera experiencias positivas, dedicar tiempo a convivir mejora el estado de ánimo y reduce sentimientos de soledad.
6. Resolución pacífica de conflictos, contribuye a que los desacuerdos que son parte de la convivencia, se enfrenten con diálogo, empatía y disposición al entendimiento, evitando tensiones.
Gómez Hernández, pide identificar la falta de convivencia saludable, también es parte del cuidado de la salud mental, algunas señales que se pueden experimentar son: el aislamiento social, irritabilidad frecuente, discusiones constantes, dificultad para expresar emociones, sentimientos de soledad o la percepción de vivir en un ambiente hostil. Reconocer estas señales permite buscar estrategias para mejorar las relaciones o solicitar apoyo profesional cuando sea necesario.
Finalmente la experta invita a fomentar la buena convivencia en familia, escuela, trabajo y comunidad es un acto de cuidado mutuo que protege nuestra salud mental. Busca ayuda en el Centro Integral de Salud Mental (CISAME), en la capital, ubicado en Av. Salk 1195, Colonia Progreso. Tel. (444) 815 94 77; en Ciudad Valles, Av. San Luis de la Paz No. 1007, Col. Rosas del Tepeyac. Tel. (481) 381 64 37. En caso de urgencia, acudir a la Clínica Psiquiátrica Dr. Everardo Neumann Peña, Soledad de Graciano Sánchez, S.L.P., Carretera Matehuala kilómetro 8. Tel. 444 100 92 50. O bien marca a la Línea de la Vida, 800-911-2000. ¿Qué pasa cuando llamas? Un profesional de la Salud Mental responde tu llamada, te escucha y orienta.
