Inicia en Tamazunchale el Recetario Huasteco: «Barriga llena, corazón contento para leer y aprender»

Con el objetivo de preservar y promover la riqueza gastronómica de la región huasteca, el Ayuntamiento de Tamazunchale, en colaboración con la Biblioteca Municipal “Manuel José Othón” y bajo el respaldo del presidente municipal Adelaido Cabañas Hernández, puso en marcha el proyecto Recetario Huasteco: «Barriga llena, corazón contento para leer y aprender».

Esta iniciativa busca entrelazar la cultura culinaria con el fomento a la lectura y el aprendizaje, en un esfuerzo por rescatar las tradiciones que dan identidad a la comunidad.

El programa dio inicio con un concurso de tamales, uno de los platillos más emblemáticos de la gastronomía mexicana. Durante este evento, las participantes no solo demostraron su destreza en la preparación de diversas versiones de tamales, sino que también compartieron con el público las historias y secretos detrás de estas recetas, muchas de ellas heredadas de generación en generación.

La Biblioteca Municipal se transformó en un espacio de encuentro donde tradición y aprendizaje se fusionaron. Además de celebrar el arte culinario, el proyecto promueve la convivencia comunitaria, fortaleciendo los lazos entre los habitantes de Tamazunchale. Este primer evento fue solo el comienzo de una serie de actividades diseñadas para dar a conocer otros platillos representativos de la región huasteca.

El programa tiene como eje central no solo enseñar la preparación de alimentos, sino también transmitir las historias y valores culturales que rodean a cada receta, promoviendo un entendimiento más profundo de la riqueza histórica y cultural del municipio.

«Con este proyecto buscamos no solo preservar nuestras tradiciones, sino también crear un espacio donde la comunidad pueda aprender, compartir y celebrar su identidad a través de los sabores que nos caracterizan», expresó un representante del Ayuntamiento.

El Recetario Huasteco continuará con actividades que celebrarán la diversidad culinaria de la región, explorando platos tradicionales y su conexión con la historia local. «Barriga llena, corazón contento para leer y aprender» se posiciona como un homenaje vivo a la cultura huasteca, demostrando que el arte de la cocina es también un puente hacia la educación, la memoria y la cohesión social.