Miguel Ángel Guerrero Arriaga
Febrero 11, 2021
Sorpresivas las resonancias políticas que continúa generando en el escenario aldeano la designación de la doctora Mónica Liliana Rangel Martínez como candidata gubernamental de Morena entre las que se encuentra un lance impensable todavía hace dos o tres semanas como el que el notario Leonel Serrato que se decía el más fiel defensor de los principios de la 4Tvaya a ser el candidato a la alcaldía capitalina por el PVEM cuya franquicia en el estado esté en manos del candidato a gobernador de ese partido Ricardo Gallardo Cardona.
Quien durante mucho tiempo fue blanco de sus más ácidas críticas en sus colaboraciones de análisis político en un periódico local en las que en varias ocasiones llegó a calificar como el “pollo pillo” a Gallardo mismo que por tales circunstancias ahora será su jefe político quien, intolerante con quienes tratan de brincarle las trancas en su entorno, de no seguir sus instrucciones, con la facilidad con que lo impulsó a la candidatura igualmente lo puede tumbar pues está acostumbrado a imponer la fuerza de su autoridad y castigar a quienes le juegan las contras o no lo obedecen y forman parte de su equipo o proyecto lo que podría llevar al fracaso este experimento de mezclar el agua con el aceite toda vez que ya es sabido lo suelto de lengua que suele ser Serrato en su trato político en una posibilidad que ya ha provocado que se crucen apuestas sobre el tiempo que durará esta inesperada unión surgida al amparo de la nominación de Rangel Martínez, aunque también habrá que esperar en qué quedan sus impugnaciones al proceso interno morenista, lo que plantea la interrogante:¿ que pasaría si prosperan?
Por otra parte, en un lance que debe haber hecho que el doctor Salvador Nava se removiera incómodo en su lecho de reposo eterno, el destape de la doctora también motivó que la que fuera precandidata Francisca Reséndiz Lara iniciara una caminata rumbo a la sede nacional de Morena con el fin de protestar contra lo que llama imposición de Mónica en la candidatura y a exigir que el dirigente Mario Delgado repare los perjuicios ocasionados por sus modificaciones a la convocatoria original tratando de emular al oftalmólogo cuando realizó la marcha a la CDMX en protesta por el fraude electoral en la elección gubernamental de Fausto Zapata a lo que no se augura éxito en virtud de que la decisión en favor de la doctora parece ser definitiva a menos que busque un premio de consolación como puede ser una curul en el congreso del estado.
