AUXILIO DE LA ALAMEDA AL MUNICIPIO
Miguel Ángel Guerrero Arriaga
Abril 13, 2019
Durante largas décadas, la alameda Juan Sarabia fue el sitio de paseo y esparcimiento de las familias potosinas que no tenían acceso a las instalaciones de los clubes sociales que contaban con atracciones para la diversión de la familia en general, incluso durante un buen tiempo se convirtió en el sitio favorito para encontrar novia o novio según lo que se pretendía pues fue el paseo favorito de jóvenes varones y mujeres para establecer relaciones de noviazgos lo que durante varios años dejó de ser luego de que las autoridades dejaran de atender el mantenimiento al que fue el principal parque de paseo de las familias potosinas al punto de ocasionar que se convirtiera en un lugar peligroso no solo para pasear sino para atravesarlo de un punto cardinal a otro.
Así entonces, luego de un largo periodo de abandono en el que los patos del lago artificial desaparecieron misteriosamente y hasta cayó en el olvido que algún tiempo hasta ofreció intentos de albergar un zoológico con unos venados en cautiverio-
Ahora como pasó con la administración anterior la alameda viene a servir al gobierno municipal como la válvula de escape para desviar la intensa presión que le supone el desmedido crecimiento del comercio informal empeñado en instalarse en el ya insuficiente centro histórico con lo que amenazan, como ya lo hemos dicho en darle un toque de monumental tianguis “garnachero en desdoro de la imagen turística que proyectaría la ciudad.
Con ánimo de evitar ese impacto la administración municipal a cargo de Ricardo Gallardo Juárez determinó en su tiempo reubicar en la alameda a un buen número de informales a los que reforzó la propuesta de llevar clientela denominando el hecho como la feria del taco y financiando funciones de lucha libre y la presentación de grupos artísticos-
En un esquema que se propone seguir exactamente la administración de Xavier Nava Palacios lo que da una idea de que la alameda no solo ha servido ni sirve para que los enamorados busquen la sombras de los árboles para demostrarse sus apasionados sentimientos sino que en un momento dado puede servir hasta para auxiliar a las autoridades municipales en el desahogo de la presión que pueden agobiarlos como el problema de los comerciantes ambulantes que también serán enviados al lugar con los estímulos anteriores para acarrearles clientela.
