La educación superior intercultural en la huasteca Potosina

Adrián del Jobo Ponce

Junio 26, 2021 

La educación intercultural se cristaliza en la huasteca Potosina en el 2011 a través del decreto de la universidad intercultural de San Luís Potosí, con una plataforma de 11 campus a lo largo y ancho del estado, potenciando sus inicios basados en los antecedentes de la universidad Indígena y de la universidad comunitaria.

El modelo educativo intercultural impulsado desde la misma Organización de las Naciones Unidas con una firme intención, ser un modelo versátil, incluyente, inclusivo, que exalta la diversidad y la gran riqueza cultural en sus diferentes miradas tanto lingüísticas, artísticas, económicas y sociales.

La labor diligente y constante que recorre todas las comunidades rurales en la búsqueda de ajustarse al contexto que demanda cada lugar. Una divulgación en la importancia que tiene, en que las generaciones se integren a la formación educativa en el nivel superior. Esto cobra mayor sentido de pertinencia con el modelo intercultural, que ofrece trabajar con los alumnos, considerando el aspecto lingüístico cultural y económico. Es importante mencionar que este modelo no está dirigido sólo hacia las comunidades rurales, si no a todas las zonas de los municipios donde se requiera educación superior.

El desarrollo del modelo educativo superior intercultural en la Huasteca, a sus pocos años de haberse establecido por medio de sus diferentes campus en esta zona, siendo, Cd. Valles, Tamuín, Tancahuitz, Matlapa, Tamazunchale y más recientemente Tanquian; cada Campus con un radio de influencia hacia las comunidades Nahuas y Tenek, así como la parte urbana de los municipios aledaños, incluso en comunidades y municipios de la sierra alta del estado de Hidalgo, sierra gorda Querétaro, Veracruz y Tamaulipas. Esta representación habla de una gran riqueza en la diversidad de culturas y contextos que se intersectan, capitalizando y potenciando la labor axiológica en la que se basa el modelo.

Hablar del beneficio estructural que provoca la educación es muy importante, pero más aún cuando se diseñan modelos que se adaptan al contexto de las zonas en donde se desarrollan los mismos, atendiendo necesidades latentes que a través de los mismos estudiantes se llevan a cabo una serie de actividades, proyectos y programas que permite la parte académica, de planeación, vinculación y desarrollo intercultural, impactando de forma holística las vidas de las familias de los estudiantes, permitiendo que la educación intercultural sea un detónate de cambio que perpetúa de forma edificante en el bienestar desde sus mismos valores.

La interculturalidad garantiza la interacción armónica entre las diferentes culturas, abriendo esta competencia y potenciando el conocimiento para que, quien recibe esta educación, pueda desarrollarse en ambientes tanto locales como internacionales. Suena romántico pero si bien es cierto, lo vemos en cada línea de trabajo que se manifiesta desde esta, tan noble labor y sobre todo en el crecimiento y desarrollo que ha tenido este modelo educativo en la zona, abriendo el abanico de oportunidades para tener acceso a la educación superior.

Ofrecer educación de forma accesible y de calidad, adaptado a las posibilidades de los estudiantes, con una mecánica curricular que brinda una inclusión académica, considerando los diferentes subsistemas de nivel media superior y la experiencia que por cuestiones de infraestructura y equipamiento, es un acierto, que necesita seguir siendo fortalecido desde los diferentes sectores sociales y gubernamentales.

La educación es conveniente en todos los sentidos a la sociedad, también, es responsabilidad de cada uno de nosotros y es necesario seguir motivando e incentivando este proyecto y el esfuerzo de la ciudadanía para lograr que nuestras generaciones priorice la educación superior en la formación que de manera gradual se manifestará en la movilidad, vialidad, comercio, dinámica económica de las micro regiones, valores sociales y en todos los aspectos a los cuales estamos expuestos e interactuando como sociedad huasteca Potosina, contando en muchos casos, lograr tener la primer generación de estudiantes de todas sus generaciones con educación superior.

Es necesario seguir coadyuvando y construyendo desde cada trinchera del sector público y privado, gobierno, academias, transporte, sociedad civil, medios de comunicación, empresas y las mismas familias para que cada día más jóvenes obtengan educación superior que les permita garantizar de una mejor forma el presente y el futuro, dignificando sus vidas y la de quienes los rodean. Es una educación necesaria es una sociedad cada vez más diversa, dinámica y demandante de un crecimiento y desarrollo para su bienestar social, económico y cultural.

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