Toño Martínez
Junio 07, 2019
-Mientras el presidente desalienta inversiones, el Gobernador de SLP inaugura industria de mil millones de dólares
Sin proponérselo, el Gobernador de San Luis Potosí, Juan Manuel Carreras López, dio una cátedra en materia de política económica y visión de Gobierno al presidente de México Andrés Manuel López Obrador, al afianzar mediante toda clase de apoyos y facilidades que la empresa alemana BMW inaugurara esta semana la fábrica de autos Serie 3, con una inversión de mil millones de dólares.
Mientras que las políticas económicas erráticas de López Obrador, la falta de promoción internacional sobre las enormes oportunidades que tiene México para hacer negocios y con ello crear empleos y dinamizar la economía, tienen paralizada la inversión privada y la pública, en San Luis Potosí el ritmo de crecimiento empresarial es de los más altos del país.
Solamente la BMW está generando 2,500 nuevos empleos directos e incubó una cadena de suministros comprando 2,500 millones de dólares adicionales en componentes para el vehículo Serie 3 que exportará a 40 países desde su planta en Villa de Reyes.
A nivel nacional estamos mal, peligrosamente mal porque además de visión obtusa del Gobierno anti corrupto de López Obrador, con decisiones muy cuestionables como cancelar el Aeropuerto Internacional de Texcoco, castrar presupuestos a salud, Semarnat, Estancias Infantiles, Refugios a Mujeres Violentadas, despedir a miles de trabajadores sin liquidación, reducir inversiones a Petróleos Mexicanos y CFE, abre la frontera a hordas descomunales de indocumentados bajo un exacerbado concepto de solidaridad con quienes huyen de la pobreza y violencia en sus países poniendo nervioso con justa razón al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, país que es la meta de esas caravanas.
De Enero a la fecha suman más de 300 mil los inmigrantes ya no solo de Centroamérica sino de Asia, África, Europa, Sudamérica y lo peor, se descubre un plan tenebroso oculto de tráfico humano con perversas intenciones contra el vecino país, contra como lo indican extraños depósitos de fuertes sumas de dinero hechos desde Chiapas y Querétaro para apoyar su paso.
Por eso Donald Trump está a punto de imponer impuestos del 5 al 25% a productos mexicanos que se envíen a Estados Unidos, y presiona para que industrias norteamericanas en territorio mexicano se trasladen allá, porque es la única forma de hacer entender a Andrés Manuel que debe frenar la inmigración.
Aunque a regañadientes, López Obrador tuvo que doblar las manos y envio 6000 mil agentes de la Guardia Nacional a la frontera sur, para impedir que sigan entrando.
Por si fuera poco, las calificadoras Fitch, Moody´s, Estándar & Poor´s ponen por los suelos la calificación crediticia de México y con ello que quienes tienen miles de millones de dólares invertidos en bonos mexicanos exijan que les digan si se los van a pagar.
Toda esa madeja de malas prácticas de Gobierno, incertidumbre en el futuro económico, sequía de inversiones que enfrenta México, tiene en San Luis Potosí un oasis porque aquí, siguen llegando capitales extranjeros a generar desarrollo, progreso.
El Gobierno de Juan Manuel Carreras López les da seguridad, confianza, un ambiente paz laboral, conectividad, buen trato y cortesía.
BMW el ejemplo más reciente, donde por cierto, el presidente Andrés Manuel López Obrador tuvo la oportunidad de haber enviado señales de confianza y apertura a hombres de empresa de muchos países para venirse a México si hubiera asistido pues era el principal invitado, pero no vino, se ocupó en “otras cosas”.
Carreras López salvó la cortesía elemental inaugurando y agradeciendo a los inversionistas por seleccionar a San Luis Potosí para su planta, y enviando lecturas positivas al exterior para que lleguen más capitales que signifiquen bienestar y desarrollo.
