Toño Martínez
Diciembre 30, 2020
La jugada fue magistral, fina, quirúrgica pero no les quedaba de otra. El Partido Movimiento Regeneración Nacional despejó el camino hacia la gubernatura de San Luis Potosí al Partido Verde Ecologista al anunciar su líder nacional Mario Delgado Carrillo que postularán a una mujer como candidata a la primera magistratura potosina.
Francamente no le quedaba de otra a Delgado Carrillo al comprobar con encuestas y sondeos directos preguntando a la gente sin que lo supieran, quien les gustaría para ser el abanderado de Morena que ni Juan Ramiro Robledo, Primo Dothé Mata, Sergio Serrano, José Antonio Lorca Valle, Alfonso Díaz de León y mucho menos Adrián Esper Cárdenas eran garantía de victoria. Ninguno reunió respaldo popular ni intención del voto que necesitaban.
Y ahora sí que como la frase célebre de Andrés Manuel López Obrador «nos cayó como anillo al dedo la pandemia», también les vino como saco a la medida el acuerdo del Instituto Nacional Electoral (INE) del 6 de Noviembre dónde obliga a que por lo menos en 7 estados de los 15 donde habrá elecciones para renovar la gubernatura las candidaturas deberán ser para mujeres.
«De aquí soy » dijo Delgado Carrillo para salir del embrollo en que estaba metido en San Luis Potosí con aspirantes impopulares, y sacó su as para aterrizar el plan ranchero de abrirle cancha al único que tiene en los hechos peso popular o sea Ricardo Gallardo.
Por ello restablecieron la alianza con el Partido Verde Ecologista, casa del «Pollo», porque así presumirán que quedan en el Gobierno. También por eso le dieron los 6 Distritos federales para que postule candidatos a diputados.
Había que apapacharlo porque sabían que con o sin ello, Gallardo Cardona llevaría las de ganar y se le pegaron. ¿Que quién será la candidata? Cosa menor.
Entre sus activos femeninos contemplados están inscritas Marcelina Oviedo y Francisca Reséndiz Alvarado y otras de paja. Nada de preocupación para los verdes y menos para «El Pollo».
A la coalición PRI- PAN- PRD la posibilidad se reduce al mínimo, les guste o no y San Luis Potosí va derechito a teñirse de verde.
Lo habíamos señalado desde meses atrás pero la soberbia impidió a los partidos mirar lo que tenían frente a su nariz, y se reían trepados en su soberbia.
