Lucha por candidaturas libres de acusaciones

Miguel Ángel Guerrero Arriaga

Enero 25, 2024

A pesar de lo reñida que se espera la contienda electoral por la alcaldía capitalina, hasta ahora, el ambiente político y social se ha mantenido ajeno a conflictos capaces de alterar la tranquilidad que priva pues los diversos aspirantes a las candidaturas, no han mostrado inconformidades o quejas por presuntas intenciones de perjudicarlos por favorecer a quienes  las buscan, como tampoco se ha escuchado aquello de que sería una elección de estado o que en sus correspondientes partidos los “dados están cargados” ni se ha señalado a alguien de ser el candidato oficial.

En este escenario, saludablemente no ha surgido quien pueda sacar a la gente a la calle para acompañar sus protestas como tanto se hizo en el pasado al que nadie quiere regresar.

En mucho ha contribuido para que la situación se mantenga en calma el hecho de que ninguno de los aspirantes a las candidaturas ha desenterrado el hacha de guerra para emprenderla contra sus rivales, ni se han ventilado acusaciones de trampas en los procesos ciertas o no que puedan ser motivo de enfrentamientos que puedan enturbiar el clima preelectoral.

Por ejemplo entre los aspirantes de la coalición Morena- PVEM- PT Sonia Mendoza Díaz y Gilberto  Hernández Villafuerte sujetos a una encuesta para decidir la candidatura cuyo resultado se dará a conocer el próximo 10 de febrero, saben que el fiel de la balanza de esta competencia por la estafeta se inclinará en favor del que su jefe político considere con mayores posibilidades de triunfar ante lo que difícilmente podrían oponerse por el riesgo de ver terminada su carrera política al no acatar la decisión que eventualmente se les haga saber.

Por lo que hace a la coalición prianista perredista, el candidato que les ofrece más posibilidades de salir con la mano en alto de la elección es la postulación de Enrique Galindo Ceballos a la reelección y aunque el panista Rubén Guajardo pretende participar en el proceso interno priista por la candidatura está cantado que sea RGC el abanderado además de que en el tricolor no le han surgido posibles competidores por la estafeta.

Así entonces el escenario político local se mantiene en calma libre de acusaciones de “imposiciones o linduras de este tipo que mucho se ventilaron en pasados procesos internos de los partidos lo que permite esperar con optimismo el resultado de a elección por la alcaldía por lo que no se generen conflictos o alteraciones del orden como las ya poco atendidas convocatorias a marchas o plantones, ni mucho menos enfrentamientos entre bandos de seguidores en medida tal que tengan su desenlace como la quema de palacio municipal como sucedió aquel mal recordado 1 de enero de 1986 por la intentona de imponer en la alcaldía a Guillermo Medina de los Santos mediante el fraude electoral según alegó la oposición por aquel año lo que no evitó que éste finalmente despachara como alcalde.

Así, aunque se anticipa reñida la disputa por las candidaturas a la alcaldía nada parece avizorar que los procesos internos detonarán conflictos que alteren el clima pre electoral como tampoco se perciben indicios de que las elecciones formales y la etapa poselectoral se vean manchadas por confrontaciones entre simpatizantes y más porque no hay nadie que haya despertado las pasiones políticas de la gente como para hacerla tomar la calle.

Afortunadamente, todos están llevando la fiesta en paz.