Miguel Ángel Guerrero Arriaga
De no concretarse alguna alianza del PVEM con otro partido para ir juntos a las elecciones gubernamentales del 2027, y si surgen circunstancias legales que le impidan impulsar a la candidatura del verde a su esposa o su señor padre el gobernador Ricardo Gallardo Cardona tendrá que echar mano de alguien de los inscritos en su catálogo de opciones para asignarle la estafeta de su partido quien deberá garantizarle confianza y certeza de que en caso de ganar la elección daría continuidad al proyecto de mantener el gallardismo en el gobierno estatal.
Ya se han difundido versiones respecto de que Pvem y morena irán separados a los comicios que tendrán lugar dentro de tres años por la confianza del guinda en que como partido en el poder presidencial cuenta con un gran hándicap para llevarse el triunfo.
Como se sabe, en morena se perfilan para la candidatura la secretaria de gobernación Rosa Icela Rodríguez tanto como su hermana y dirigente estatal del partido Rita Ozalia.
Como prospectos a la candidatura del verde es sabido que son la esposa y senadora de RGC Ruth González Silva, al igual que su padre don Ricardo Gallardo Juárez los que podrían verse impedidos de serlo en caso de que la presidenta Sheinbaum concrete su propuesta de cerrar el paso a la reelección y el nepotismo consiste en prohibir que parientes cercanos queden en lugar de parientes que encabecen un gobierno municipal una senaduría o una diputación lo que seguramente se extendería a las gubernaturas estatales.
De presentársele tal circunstancia, el gobernador tendría que acudir a alguien de toda su confianza que le asegure una salida tranquila y, decíamos la continuidad del gallardismo en el gobierno.
Ante la posible cancelación de sus opciones familiares y en función de que no hay otras figuras en su entorno que hayan crecido ya son muchos los que ven como quien podría ser la alternativa gallardista para impulsarlo como posible relevo abanderado del verde al actual secretario general de gobierno Guadalupe Torres Sánchez mismo que por la importancia del cargo es visto como aspirante natural a la candidatura gubernamental además de que es el funcionario de todas sus confianzas cuya lealtad le permitiría una salida tranquila y la cercanía necesaria para velar por la continuidad del gallardismo.
Por otra parte, Lupe Torres, no se ha sentado a esperar que le lleguen solas las cosas toda vez que desde su puesto ha podido tejer una fuerte red de apoyos con numerosos liderazgos políticos de todo el estado, alimentando la fuerza del pvem con la adhesión de importantes personajes alcaldes y gente de otros colores que ya no vio futuro en los partidos en que militaban sin pasar por alto que si hay alguien que defiende la camiseta gallardista con todo es él demostrando así su lealtad al mandatario lo que lo coloca como una pieza fuerte a ser considerada por RGC como la opción viable para ir por el verde en las elecciones del 2027 de cancelársele las otras piezas que se ventilaban antes como tales.