México de colores de cualquier tonalidad: de alegría pero también de tristeza.

Dr. Jaime Chalita Zarur

Noviembre 26,

México, por instancias es un país sub-realista en el que, las penas y dolores del alma, también del cuerpo y, la precariedad de la vida como se vive en una creciente penuria, se pierden en las festividades y, la que se aproxima, caray, la de cada tres o seis años, nos hace que se nos olvide todo lo malo que nos pasa. Ánimos del mexicano con alegrías que, generan huecos que otros aprovechan para lograr intereses que no son del pueblo bueno y sabio.

La fidelidad es ya, un artículo de lujo que solo se encuentra en las personas honestas y, que están en búsqueda permanente de ser congruentes con el pensar, decir y hacer. Un estilo de vida que en lo práctico es muy difícil encontrar y, cada vez mas, la polarización de la convivencia es mayor. Pareciera que se hace a propósito tender la trampa para que caigamos en ella.

Sostengo que la verdadera libertad del ser humano, se encuentra en la intimidad del intelecto, es ahí, en donde podemos imaginar, pensar, planear, soñar, incluso pensar mal de los demás, pero también, una enorme gama de actividades que se tiene en la capacidad de ejercer las funciones de nuestro cerebro, haciendo lo bueno y, o, lo malo, dependiendo de lo que se planea, igualmente del tema que se trata y, de que lado se esta.

Todos hemos escuchado cada día, el uso y abuso que han estado demostrando las personas, en todas las agendas, sobre todo en las políticas, las palabras que se refieren a los principio y valores de la gente. Ambos conceptos se refieren al comportamiento que asumimos en la sociedad, tratando de hacerlo propiamente, aun cuando nadie nos vea. La realidad es otra.

Los principios son reglas generales y universales que la sociedad toma como deseables y que deberíamos adoptar como es la libertad. Por otro lado, los valores son atributos o cualidades que cada uno percibe como positivos no siendo universales, si no más bien referentes a las aceptaciones personales, como pudiesen ser los valores religiosos que cambian según las distintas asociaciones o, sociedades en el mundo.

Complementos: valores y principios; unos personales y los otros universales pero que, hablan de la congruencia de las personas, muy escasa en estos tiempos de los adictos al poder y dineros pertenecientes a lo público. Inicia la temporada de registros “democráticos” y, algunos logran su cometido en el pago de un alto precio ético pero, otros emigran a donde las conveniencias les sean favorables, incluso para luchar en contra de los que en algún momento fueron sus compañeros jurándose amor eterno: pero todo termina y, se miente.

Valores y principios, si de verdad las personas están convencidas de ellos tendrían que reflejarse en un estilo de vida y luchar por ellos en las diferentes comunidades sociales igualmente, en los partidos políticos de los que han sido parte y no, salir corriendo en tanto no son contemplados sus intereses. Desde luego que para lograr una mejor vida gregaria, es vital la congruencia con valores y principios de las personas para no Interrumpir la armonía del pueblo que desea, solo el progreso social.

Pero … la temporada electoral ya inició y, como los barcos que se hunden, lo ocupantes lo abandonan, cuando de ello depende sus vidas. Así es lo que sucede en los sectores de los partidos políticos que quienes pertenecían a ellos, defendían sus principios y valores contra vientos huracanados y mareas altas. No más; muchos de esta especie de políticos, viendo que el partido al que pertenecen, no los tomó en cuenta, deciden emigrar a otros institutos políticos que les den cobijo.

Así, los principio y valores se ven vulnerados, en tanto los intereses que representa la sociedad, pasan a un termino de segunda y el enfoque de la adquisición de votos, será lo que cuanta.

¿La razón del abandono de principios y valores?, los sueldos del sector publico que ahí se dan y, no la importancia del servicio público y la defensa de los valores y principios de quienes participan queriendo alcanzar metas muy personales.

@jaimechalita