Miguel Ángel Guerrero Arriaga
Diciembre 23, 2021
El día de ayer los potosinos recibimos una especie de regalo navideño que bien podría tenerse como una fecha histórica pues por primera vez desde que detonó aquí la pandemia del coronavirus se registraron únicamente 10 contagios luego de que en la crisis de casos positivos registrados la cifra llegó a alcanzar los 600 contagios en un día así como prolongadas rachas de 500 o 400 afectados cada 24 horas.
Decimos que bien podría inscribirse como fecha histórica en virtud de que es la primera ocasión desde marzo del 2020 en que se detectó la pandemia que los contagiados llegan a una decena, fenómeno que podría tener su explicación en que finalmente, el grueso de la población ya tomó conciencia sobre la importancia de seguir las medidas sanitarias como el uso del cubrebocas, mantener la sana distancia y evitar las aglomeraciones lo que sería un gran avance en el combate a la pandemia pues hasta mediados de este año y durante casi todo el 2020 gran parte de la gente rechazaba usar la mascarilla protectora y asistía a lugares concurridos sin esa protección lo que originó grandes rebrotes que algunas veces hicieron que SLP cayera al color rojo del semáforo epidemiológico que lo implicó la suspensión de las actividades productivas académicas y sociales.
Ese gran descenso en el número de casos podría deberse también a las intensas campañas de vacunación contra el covid que se han llevado a cabo incluyendo las últimamente emprendidas para la aplicación de las dosis de refuerzo entre los adultos mayores que, en términos generales, han sido exitosas y casi está cumplida la meta de aplicarla a los sectores que la requerían en un gran esfuerzo desarrollado por el personal de salud asignado a todos los módulos de vacunación que atendieron con una gran calidad y calidez humanas.
Lo que haya sido pero el caso es que en cuestión de contagios SLP ya ha registrado mínimos históricos que bien pueden sostenerse de continuar la concientización de la gente sobre la importancia de protegerse del riesgo de transmisión del virus lo que no requiere de grandes esfuerzos aunque sí de una buena dosis de decisión para hacerlo y más ahora que el estado parece estar en el camino correcto en la tarea de contener la pandemia.
Por la monumental iluminación que luce el centro histórico y la plaza de armas, además de las calles aledañas esta puede ser la temporada de navidad y fin de año que la ciudad reciba la mayor cantidad de turistas de una década para acá pues nunca se había hecho un esfuerzo tan colosal para darle un marco tan esplendoroso a la zona céntrica con su pino navideño gigante de Fundadores y el espectacular árbol navideño de luces colocado por el ayuntamiento en la plaza de armas que no dejan de ser el fondo de las fotografías que se toman los visitantes que ya son muchos los que están según se nota en la romería que no deja de tomárselas en esos lugares. Esta columna desea desde aquí a quienes nos hacen el favor de leerla una feliz navidad y un año nuevo cargado de salud y prosperidad.
