El Día Mundial contra el Trabajo Infantil se conmemora para concientizar sobre la problemática.
En el país, alrededor de 3.7 millones de niñas, niños y adolescentes realizan alguna actividad laboral.
Cada 12 de junio se conmemora el Día Mundial contra el Trabajo Infantil con el objetivo de crear conciencia sobre la problemática que afecta a niñas, niños y adolescentes a nivel mundial, y que de acuerdo a la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI) 2022, en México el 13.1 por ciento de la población infantil y adolescente, es decir 3.7 millones se encuentran en condición de trabajo infantil.
El trabajo infantil se refiere a la participación de niñas, niños y adolescentes menores de 18 años en actividades laborales, las cuales pueden poner en riesgo su desarrollo, su estado de salud, su educación y bienestar; el trabajo infantil es una forma de maltrato, ya que obliga a las y lo menores a involucrarse en actividades prematuras, asumiendo roles que no corresponden con su edad, y les aleja de su entorno escolar, famliar y social, dijo el Jefe del Departamento de Atención a la Salud de la Infancia y la Adolescencia de los Servicios de Salud.
Indicó que para determinar si una actividad específica constituye trabajo infantil se deben considerar los siguientes aspectos: edad del menor, tipo de trabajo realizado, candidad de horas dedicadas y las condiciones en las que trabaja. Y los criterios que indican que una actividad puede representar un riesgo para el desarrollo de las y los menores son: dedicación exclusiva o excesiva, responsabilidades excesivas para la edad, impedimento para asistir a la escuela, ambientes insalubres con exposición a sustancias tóxicas, agentes peligrosos, temperaturas extremas, ruidos o vibraciones dañinas, espacios cerrados, en alturas, bajo tierra o en el agua, así como lugares donde puedan ser vulnerables a los abusos físicos, psicológicos o sexuales.
El funcionario de los Servicios de Salud mencionó que los sectores en donde se tiene registro de menores trabajando en el país esta encabezado por la agricultura y ganadería, seguido del comercio informal, servicios domésticos, industria manufacturera, trabajo en la calle y en la vía pública. Entre las consecuencias que pueden tener las niñas, niños y adolescentes que realizan trabajo infantil se encuentran las lesiones físicas, ya que sus cuerpos aún están en desarrollo y son más vulnerables a los accidentes; problemas de salud como enfermerdades respiratorias, quemaduras, cortes o amputaciones por manipular maquinaria, y estas pueden durar toda la vida afectando su bienestar y desarrollo integral.
