PANISTAS SIN DISFRACES DE PROCESION

Miguel Ángel Guerrero Arriaga

Marzo 17, 2020

Afortunadamente, la cordura y la prudencia permearon los puntos donde se toman las decisiones en torno a los grandes eventos religiosos y deportivos de tal suerte que llegaron a la plausible conclusión sobre lo necesario que era cancelarlos a fin de evitar exponer a los asistentes al contagio de la COVID 19 que multitudinariamente acuden a presenciarlos como se registra en el principal festejo religioso de la semana santa en San Luis como es la procesión del silencio que por esa razón se canceló este año por primera vez en su historia lo que es bastante razonable pues se trata de algo que genera grandes concentraciones de personas a lo largo de su recorrido entre las que nunca faltan turistas extranjeros que podrían ser portadores del coronavirus, lo que obligará a las autoridades de turismo s sacudirse la modorra e idear otros actos que interesen a los visitantes que podrían tener lugar en espacios al aire libre donde pueda aplicarse aquello de la sana distancia.

También es lógico que mucho extrañarán la celebración de la marcha silente los ridículos panistas que la aprovechaban para ganar focos mediáticos disfrazándose de centuriones romanos o con el gorro de algunas de las cofradías participantes aunque, ahora al faltar el marco para hacerlo podrían cambiar y en vez de esas vestimentas con qué posar para los fotógrafos de los medios podrían hacerlo con uniformes de policías de seguridad pública municipal o si se quiere apantallar pedir unos de la guardia nacional para no perder la costumbre de sacar ventaja de la ocasión ni de hacer el ridículo.

También se canceló el torneo de tenis San Luis Open organizado tradicionalmente por el club deportivo potosino y otros actos que se perderán por ese virus como los de la feria del libro de la UASLP, que incluían presentaciones de libros y conferencias de autores aunque, al parecer la exhibición y ventas de libros en el edificio central se permitirá que continúe.

Por lo demás, es evidente que la mayoría de los potosinos sí ha atendido el llamado a no salir de caso si no es indispensable pues la tarde de este martes la ciudad lució desierta y por la mañana el tráfico vehicular se ofreció fluido en las afueras de escuelas y colegios ante la falta de las madres de escolares que llegaban a toda velocidad a dejarlos a clases lo que se repitió al medio día a la normal hora de salida de los planteles pues ya con los infantes en día de asueto los abuelos y demás parientes deben haberlos tenido bajo su cuidado pero sí fue un respiro para la ciudad y la agobiante circulación diaria de vehículos.