Miguel Ángel Guerrero Arriaga
Diciembre 15, 2019
Los intereses políticos y el temor a sufrir problemas financieros ocasionaron que el Congreso de la Unión no reuniera en su sesión del pasado día 13 los votos necesarios para aprobar una reducción del 50% al financiamiento de los partidos políticos, con lo que no se pudo cumplir una de las promesas de campaña más reiteradas del hoy presidente Andrés Manuel López Obrador por lo que seguirán recibiendo miles de millones de pesos anualmente, al oponerse a la iniciativa en ese sentido presentada por el grupo parlamentaria de Morena, los diputados de los institutos políticos opuestos, perdieron la oportunidad de congraciarse con los mexicanos que no dejan de considerar a los legisladores federales como los políticos más abominables y a la cámara en la que están integrados como la institución mayormente desprestigiada e inconfiable del país.
A pesar de que la iniciativa de aprobar esa reducción y que despertó el optimismo de que pudiera concretarse, la falta del adecuado cabildeo entre el resto de las fuerzas políticas impidió que se reunieran los votos necesarios para aprobarla.
De acuerdo a los reportes de la sesión legislativa el grupo mayoritario de Morena, logró conjuntar 274 votos en favor, pero para obtener la mayoría calificada se requería que contaran con 321 votos aprobatorios y los faltantes 47 sufragios se los negaron los grupos parlamentarios del PRI, PAN MC PRD y PVEM los que, a final de cuentas, fueron los factores decisivos para desvanecer la posibilidad de aligerar la enorme carga financiera que representa para la nación el financiamiento de los partidos políticos y, con la reducción ahorrar al país algo así como 2 mil 500 millones de pesos anuales, aunque se entiende que se opusieran a la reducción toda vez que todos carecen de capacidad para ser autofinanciables en virtud de que la militancia se niega a pagar regularmente sus cuotas partidistas, obligación que únicamente cubren cuando es requisito indispensable hacerlo para obtener alguna candidatura a un cargo de elección, pero no concretaron la reducción por lo que los diputados federales tendrán que resignarse a ser los políticos más abominados.
CABOS SUELTOS
Por cierto, a nivel estatal también los diputados locales son, de la clase política potosina, los que mayor rechazo registran, y peor lo serán a partir de su aprobación del aumento del diez por ciento a las tarifas del agua que entrarán en vigor desde el primero de enero próximo… Por la proliferación de los percances automovilísticos en la ciudad, no se ve que los retenes anti alcohol están contribuyendo a disminuirlos aunque sí fomentan los afanes recaudatorios municipales…