Toño Martínez
Noviembre 28, 2023
Haber Señor presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que culpa tiene la gente buena y noble libre y democrática que todavía queda en México, de que el ultraderechista Javier Eduardo Milei se haya convertido en nuevo presidente de Argentina desde el 19 de noviembre y le hiciera pasar la peor rabieta de su vida por el golpazo seco y con chipote que con ello le dio a los planes del Foro de Sao Paulo para convertir a América Latina y El Caribe en región con gobiernos de izquierda, proyecto del cual forma parte y ha trabajado por liderar esa corriente ideológica.
Fue tan evidente la furia que con su estilo discursivo cargado de frustraciones ideológicas, y sin mínima decencia diplomática se fuera contra Milei con críticas y señalamientos virulentos comparándolo con dictadores como Francisco Franco, Augusto Pinochet, Jorge Videla y nomás le faltó Idi Amin Dada de Uganda y otros más de tinte neoliberal cuando eso no venía ni viene al caso. Como atreverse a compararlo con Hitler, por favor.
Porque no mejor se enfoca a atender el desastre de Acapulco, la criminalidad y violencia que por todos lados, ensangrienta a la República, a las desapariciones y femicidios, la migración que usted mismo alienta y aplaude o el desequilibrio en la balanza comercial con Estados Unidos que es deficitaria en 1O mil millones de pesos, o buscar como cumplir las promesas de gasolina y luz baratas, a bajar precios en alimentos y a hacer realidad la mejora en servicios de salud y medicina.
Milei representa todo lo contrario a la filosofía del socialismo champurrado disfrazado de «humanismo» que tanto machaca desde las mañaneras y que solo genera desigualdad social. Javier Eduardo Milei no busca centralizar el poder y por el contrario propone fortalecer la división de poderes para crear equilibrio político y estado de derecho. Ni es enemigo de la libre empresa ni de la clase media o de los intelectuales ni pretende meter sus tentáculos hasta en las universidades.
Sabe que la libre empresa genera empleo, fortalece la economía y el desarrollo; se aliará con sectores, no los confrontará ni dividirá.
Definió su respeto a la libertad de expresión y no expondrá la vida privada de los periodistas que no esten de acuerdo con su gobierno como es otra característica de su regimen.
No quiere un estado empresario como sucede con la cuarta transformación y en cambio alentará la inversión privada y respaldará la producción del campo y un sistema de seguridad diseñado por expertos, práctico no politizado.
Sus iniciativas son extensas pero todas enfocadas a dar un viraje total a las condiciones del país para recuperar la fortaleza económica, social productiva de Argentina, cosa que se contrapone a los a “sabios» de Sao Paulo.
Cree que a Javier Eduardo Milei le preocupan sus berrinches izquierdistas por truncar el plan del Foro de Sao Paulo? Pues no, la derecha viene recuperando terreno no solo en América Latina con matices diferentes no para forjar países que vuelvan al pasado con pocos ricos y muchos pobres.
Sería mejor que pusiera las barbas a remojar y dejar de entrometerse en la vida de otros países.
Acuérdese y haga efectiva la frase de Benito Juárez que supuestamente admira más que a Simón Bolívar “El respeto al Derecho Ajeno es la Paz». No hay metiche que salga bien.
El año próximo tendremos elecciones y no se vale que por sus preferencias ideológicas le vaya a dejar un barco que hace agua a Claudia Sheinbaum, a Xóchitl Gálvez o a Samuel García pero sobre todo a los mexicanos.
No todo lo que a hecho es malo, mejor púlalo aunque no le quede tiempo para hacer mucho inténtelo. Sale?
