Dr. Jaime Chalita Zarur.
Marzo 10, 2024
México está en peligro de vida en el que sus habitantes llevarán la peor parte, sí las diferencia siguen abriendo heridas tan profundas que duelen mucho.
Primera semana de estas campañas federales en nuestro País, y me han dejado experiencias que lastiman en el alma. La cercanía con las personas de cualquier edad, cultura o, economía, con la familiaridad que siempre lo he hecho, veo que las personas, están tan desencantadas de la historia política de nuestro México, en lo referente a las promesas incumplidas históricamente o, cuando menos cumplidas inconsistentemente.
Quienes vivimos en este gran México que, luego no queremos aceptar que es nuestro país, y corresponsables y por miedo o, mezquindad, de lo que nos pasa negándonos el querer saber nada y, nos apartamos preocupados solo por lo nuestro.
No hay manera de recompensar la falta de ayuda y oportunidades para quienes menos tienen y es que, las ansias de progresar y ser el gran país que nos merecemos, están adormiladas en el subconsciente de las personas. Despertar el apetito por el progreso compartido y, la solidaridad para ser corresponsables con la riqueza nacional, es una tarea enorme, complicada y difícil pero, no imposible.
Una sociedad organizada, puede lograr mucho y conquistar la armonía social, conservando las libertades ganadas a la autoridad y, que no son concesiones de quienes gobiernan y sí, logros que han costado sangre y vidas.
Tarde o temprano, esperaría yo, que más temprano, despertáramos esa conciencia social que necesitamos para reducir drásticamente las brechas sociales y armonizar nuestra convivencia social. Finalmente nada de este mundo nos llevaremos y, compartir el bien vivir con los demás, espacialmente con quienes lo necesitan, es indubitable.
Las libertades que ahora conocemos y que a muchas personas no les costó conquistarlas, están a punto de perderse y todo por las ansias de otros por querer dominarlos bajo el yugo que se apetezca. Y cómo se podría conocer lo que no se vivió, simplemente ahí estaba y… se tomó.
Habría que agregar muchas circunstancias que el espacio me compromete para ir desmenuzando cada uno de los temas que nos duelen pero que, son en grado superlativo conocidos por todas las personas que habitamos esta república que nos da cobijo.
Pero si, el común denominador de los males es el dinero, usémoslo para quienes menos tienen y que lo hagan producir. México tiene que ser una potencia económica, que se le ha negado por avaricias impúdicas y, no querer ver a más personas disfrutando de todo lo que la vida nos da.
Exceptuó a las personas mayores y, desde luego madres solteras y a quienes están impedidos por alguna razón, los demás debemos cumplir nuestras obligaciones para compartir con quienes no han tenido la oportunidad de salir adelante.
Tiempos electorales, tiempos de ofrecimientos y promesas. Tomemos lo que se ofrece y hagamos que los compromisos tengan forma de exigencia para su cumplimiento en las promesas que se hacen.
@jaimechalita