La Dra. Isabel Lázaro Báez, titular de la Agenda Ambiental de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), llamó a asumir hábitos de consumo más responsables durante la temporada decembrina, un periodo en el que suelen aumentar los desechos por envolturas, utensilios de un solo uso y empaques de diversos productos.
Explicó que uno de los principales problemas es la falta de reflexión antes de comprar. Subrayó que, aunque recibir o entregar un regalo siempre es motivo de alegría, es necesario pensar en los materiales que se requieren para producirlo y en el impacto que generan una vez que se desechan. Por ello, recomendó optar por objetos que puedan reutilizarse o integrarse a esquemas de economía circular, donde los productos mantengan su utilidad el mayor tiempo posible, en lugar de seguir el ciclo rápido de “adquirir y tirar”.
Indicó que, aunque el uso de losa o recipientes reutilizables implica lavarlos, es una carga menor si se compara con los daños ambientales que provoca la basura desechable. En el caso de las envolturas, recordó que su fabricación implica un gasto considerable de agua y energía, por lo que una alternativa es recurrir a telas o materiales que puedan tener un segundo uso dentro del hogar.
La titular de Agenda Ambiental señaló que existen numerosas ideas accesibles para reducir residuos, desde regalos hechos con materiales reaprovechados hasta empaques creativos que eviten el consumo de papel nuevo. Añadió que estos criterios también pueden transmitirse a niñas y niños, por ejemplo, mediante la entrega de materiales como cartón, papeles o pinceles que puedan emplearse repetidamente.
Recordó que cada mes la Agenda Ambiental ofrece espacios de acopio para que la población entregue materiales en buenas condiciones. En el caso del unicel, puntualizó que sólo puede reciclarse cuando está limpio y completamente blanco, mientras que otros productos deben conservarse íntegros para facilitar su reutilización. Estos procesos, dijo, permiten que más personas se involucren en prácticas de reciclaje real y no sólo en la separación básica de desechos.
También abordó el hábito de sacar ropa o artículos personales durante el invierno. Señaló que donar es una práctica positiva siempre que los objetos estén limpios y en buen estado, ya que pueden ser útiles para otras familias. Añadió que desde la Agenda Ambiental se impulsa una campaña para que el municipio cuente con mecanismos de acompañamiento que orienten a la población sobre cómo realizar estas entregas de forma adecuada, pues muchas veces existe la intención, pero no la guía.
Finalmente destacó que, cuando estos esfuerzos se realizan de manera organizada, los objetos que ya no tienen lugar en un hogar pueden llegar a otro en donde sí serán aprovechados, fortaleciendo así una cultura de consumo responsable y solidario.b