Miguel Ángel Guerrero Arriaga
Abril 07, 2020
Ahora sí el que quiera jugar a la ruleta rusa con muchas posibilidades de tener un resultado con posibilidades de ser mortal puede romper el confinamiento en sus casas luego de que se declaró la entrada de SLP a la etapa de transmisión local, lo que significa que puede contraerse el coronavirus por contagio directo de alguien que la padezca a su alrededor y no después de haber entrado en contacto con personas portadoras del virus por haber un viaje a un lugar de alta incidencia o por haberse infectado al tratar con alguien que haya traído la enfermedad del extranjero como los paisanos que vienen de Estados Unidos.
Lamentablemente, como lo informó el comité de seguridad por la salud San Luis ya alcanzó la cifra de 40 casos confirmados positivos de COVID 19 y 3 decesos además de 108 sospechosos en estudio los que en su mayoría fueron contagiados en SLP los que podrían dispararse exponencialmente de no acatarse las medidas del distanciamiento social pero, principalmente, por romper la cuarentena o el aislamiento social sin una justificación real de por medio.
En este orden es por lo que la secretaria de salud Mónica Liliana Rangel en su rueda de prensa diaria no deja de insistir en la necesidad de mantener el confinamiento en las casas como fórmula efectiva para disminuir en lo posible la velocidad de propagación de la enfermedad, en que el peligro es real y ya está presente en la vida de los potosinos y que romper el confinamiento equivale a jugarse la vida exponiéndose al contagio sin necesidad y además sin saberlo pues hasta la puede transmitir una persona que ni siquiera sepa que es portadora del virus.
Así entonces por esa condición de la transmisión local, los próximos días serán cruciales para detener el avance del COVID 19 y si las cifras se mueven hacia arriba no habrá más culpables que aquellos que rompan la cuarentena y más se prolongará si no nos disciplinamos como ya lo hicieron en Italia y España donde a la cuarta semana de confinamientos lograron reducir el ritmo de contagios y fallecimientos luego de miles y miles de decesos.
Por consiguiente, de continuar registrándose gente pululando en las calles pese al peligro de que el virus está acechando podría obligar al gobierno a la toma de medidas extremas como el de desplegar operativos policiacos para obligar a las personas que se encuentren en la calle a que regresen a sus casas, o que se les aplique una severa multa económica por ponerse en riesgo y convertirse en posibles focos de infección de gente que sí respeta las medidas sanitarias.
Así entonces, el que por su gusto rompe la cuarentena hasta el contagio le sabe, ojo.
