Filiberto Juárez Córdoba
Viernes 30 de octubre de 2020
Informes coronavirus: http://bit.ly/2SpyOMh, teléfono 800-123-8888. Quédate en Casa, si sales, usa cubrebocas y lávate seguido las manos
QUE COMO GALLOS descabezados, y gallinas por supuesto, andan los afiliados a la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos del Estado, pertenecientes a la Confederación Nacional Campesina, porque no se ha renovado su dirigencia, a pesar de que mucho lo han solicitados y que desde hace más de un año el dirigente nacional, Ismael Hernández Deras, designó a Héctor Covarrubias Rendón, como delegado para que se hiciera cargo de ese proceso. Dicen que el periodo del actual dirigente se venció hace varios años y que la organización campesina requiere urgentemente acciones que permitan atender las necesidades de los hombres del campo. Hay un movimiento de líderes naturales y representantes de comisariados ejidales y otras organizaciones de productores agropecuarios, que están pugnando por reactivar a su organización para poder encontrar soluciones a la problemática derivada de la contingencia sanitaria por la pandemia y también para buscar alternativas de apoyos para la reactivación económica ante la suspensión de programas gubernamentales que los ayudaban a paliar su situación. Han enviado comunicados al líder nacional y tenido pláticas con el delegado y poca atención ha recibido. Incluso han platicado con la dirigencia estatal del PRI, debido a que ellos forman parte de su sector campesino. Lo único que pedimos es que se haga la asamblea para renovar la dirigencia y que la participación de todos se respete, nos dijeron. Urge tener un liderazgo fuerte y capaz de incluir a todos para trabajar en unidad. Tienen presencia en todas las regiones del estado y disposición para sacar adelante sus proyectos. Queremos gastar los esfuerzos en sacar proyectos y programas, nos dijeron, esperamos que nos hagan caso, para no tener que organizarnos para sacar a los que no se quieren ir, no trabajan por el campo ya, ni nos dejan trabajar a nosotros, aseguraron. Parecen muy decididos y nos van a mandar más datos de lo que están planeando y de quienes se están sumando a su movimiento.
DICEN QUE San Judas Tadeo -uno de los 12 apóstoles y uno de los 2 Judas, el otro era Judas Iscariote-, es el santo de las causas difíciles y desesperadas y por eso los católicos de México le tienen mucha fe. La devoción es tal que se refieren a él como San Juditas, utilizando el modo con el que expresamos afecto o consideración. Tanto cariño nos lleva a pensar que de cualquier cosa vamos a salir bien librados si nos encomendamos a él. La confianza quedó demostrada este 28 de octubre, pues hubo fiestas multitudinarias en su honor desafiando las disposiciones de las autoridades y al coronavirus mismo. Sin ánimo de mermar la fe que se le tiene, esperemos que las causas difíciles y desesperadas por las que haya que implorar su intercesión y benevolencia, no sean los contagios que se potencializaron al llevarle mañanitas o festejarlo con un buen bailazo. A mitad de noviembre no van a faltar los que le estén pidiendo un milagrito. Lo malo es que para la indisciplina social, disfrazada de fe o tradicionalismo, no se ha podido encontrar ninguna vacuna.
EL DÍA DE MUERTOS, que por cierto es una celebración que se extiende por varios días, puede constituir también un detonante de contagios si no hacemos las cosas como debemos. Las visitas a los panteones no se van a permitir, pues por disposición estatal deben permanecer cerrados los días, 30 y 31 de octubre, así como 1 y 2 de noviembre. Se habla de la prohibición o suspensión del Xantolo y demás expresiones de la temporada, pero la verdad sólo se trata de los actos públicos masivos. En lo íntimo, con las debidas precauciones, cada quien puede celebrar en su casa, en familia, de acuerdo a la tradición. También se puede echar mano de la tecnología para reuniones virtuales y actividades a distancia. Es cosa de adaptarnos y proponernos no arriesgarnos. Luego viene la temporada decembrina y si en cada festividad vamos a tener un relajamiento social eufórico, esto va a ser el cuento de nunca acabar.
AHORA RESULTA que muchos quieren ser candidatos independientes al grito de que la ciudadanía ya le perdió la confianza a los partidos políticos, lo cual pudiera parecer bien, pero lo que resulta incongruente es que los que se quieren acoger a las fórmulas de independencia partidaria, vienen directamente de los partidos y son de los que, con sus actuaciones, incidieron en el desencanto de la población. Habrá que ver cuántos de los que se apuntaron, reúnen los requisitos y son capaces de conseguir las firmas de respaldo que la ley exige.
EN ESTOS DÍAS tendrán que empezar a definirse las cartas con las que cada partido va a salir a competir por la gubernatura. Para algunos observadores desapasionados, la competencia verdadera puede estar entre el PRI y el PAN, pues son fuerzas políticas que tienen estructura, experiencia en campañas políticas y habilidades para subsistir en la alternancia. Aunque muchos aseguran que el MORENA es el partido de las más amplias posibilidades, el desgaste del ejercicio del poder, la falta de cohesión, sentido de unidad, y disciplina interna; la lucha tribal y los muchos aspirantes que buscan colarse a lo que consideran es el carro de los seguros ganadores, puede provocarle muy malos resultados.
ENTRE LOS QUE se mencionan como aspirantes a la candidatura a la gubernatura, por el MORENA, se encuentran Juan Ramiro Robledo, Primo Dothé Mata, Gabino Morales, Leonel Serrato, José Antonio Lorca, Ricardo Delsol Estrada, Francisca Reséndiz, Elías Dip Ramé, Adrián Esper, y alguno que otro que en cualquier rato sale a relucir. Del PRD no se sabe gran cosa y del Verde, no hay otro más que Ricardo Gallardo Cardona. Del PAN se mantienen los siete que ya han sido muy mencionados y del PRI los nueve. Una gran lista de aspirantes, suspirantes y delirantes, y aunque en ellos hay personajes muy notorios, todavía hay quienes repiten a cada rato que la caballada está flaca. NOSOTROS DECIMOS:
Otra opinión se desborda
Y con precisión destaca,
Más que caballada flaca
¡Parecen mulada gorda!
