Toño Martínez
Julio 15, 2020
Que el nombre e imagen de Sonia Mendoza Díaz apareciera en un listado de ex senadores tratando de involucrarnos con los presuntos actos de corrupción del ex director de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya, por haber aprobado en su momento la Reforma Energética, habla del nivel al que está llegando la 4T sin mínimo pudor, en un afán por descalificar a todo aquel político que estorbe a sus planes de ganar todos los espacios de elección en el 2021.
Sonia Mendoza por su fuerte arraigo popular en San Luis Potosí, es una roca en la ruta de la gente de Andrés Manuel López Obrador para quedarse con la silla que dejará Juan Manuel Carreras López.
Vamos por partes: es muy diferente que los senadores en su momento hayan aprobado la Reforma Energética pues es su responsabilidad legislativa velar por todo aquello que represente avances estructurales para darle mayor sustento al desarrollo de México, a mezclarlos con actos de corrupción de Lozoya.
A, pero los de la 4T que buscan cualquier resquicio para atizarle a quien le sienten ventaja política, difundieron tendenciosamente la relación de senadores de la Reforma Energética para inducir en su contra opiniones negativas.
Sonia Mendoza no es obra de casualidades políticas; es una mujer que ha escalado paso a paso su carrera política desde que ingresó al Partido Acción Nacional dónde desempeñó diversas comisiones que fueron forjando su sensibilidad y personalidad pragmática.
Su primer peldaño fue ser nombrada como Síndico Municipal en Matehuala y de ahí pie a tierra fue electa Diputada local dos veces, Diputada federal y Senadora de la República. También fue delegada estatal del Registro Agrario Nacional.
Su arraigo popular es inobjetable y figura entre los principales prospectos del PAN para convertirse en candidata a la gubernatura.
Un plus de Sonia Mendoza es que pertenece a esa clase de personas de carácter indomable y las críticas perversas la hacen crecer.
Tiene el perfil de líder que toda sociedad requiere en tiempos de crisis como la de ahora, con impactos negativos en muchas vertientes de las actividades sociales, cuando es necesario reconstruir lo que ya no funciona.
Por eso Sonia Mendoza estorba a los proyectos de la 4T en San Luis Potosí y de ahí la campaña negra desatada en su contra, pero eso ni le asusta ni la doblega.