Toño Martínez
Derivado de una sequía que dura ya 5 años, los pozos de San Vicente Tancuayalab perdieron el 50% de su capacidad de abasto lo cual está desembocando en una crisis sin precedente y requiere de urgentes y costosas inversiones para resolverla.
Tan solo terminar el tendido de tubería para llevar agua al ejido San Francisco Cuayalab, uno de los más grandes, requiere del presupuesto de dos años del municipio, unos 60 millones de pesos más otros 35 millones para instalar la red interna del poblado y no estamos en capacidad de resolverlo solos, señaló el presidente municipal Jesús Soni Bulos.
Por ello dijo que están buscando un convenio con los gobiernos del Estado y Federal para la línea primero y después la red urbana, agregó.
Durante un foro sobre el agua que tuvo lugar en el auditorio de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí Campus Huasteca, Soni Bulos habló sobre el grave desabasto y dijo que contrario a lo que muchos piensan en relación a que la Huasteca es una gran cuenca hídrica la realidad es muy distinta, porque arroyos, ríos, manantiales están cada año más secos y se deben buscar con urgencia alternativas de solución.
Una de ellas sería revisar las corrientes principales de arroyos que en temporada de lluvias arrastran gran volumen, para hacer represas que almacenen agua para riego y abasto humano.
En la región abundan los arroyos que se han secado pero que al llover recobran su volumen pero se pierde.
Son obras que no requieren grandes inversiones y muy prácticas.
Otra es la cosecha de agua en viviendas a través de tinacos y aljibes que recojan el líquido que escurra de los techos.
Este sistema es magnífico y un ejemplo lo demostró: durante una sola noche de lluvia en Tanlajás el techo de una casa compuesto por cinco láminas capto cinco mil litros de agua.
Jesús Soni Bulos expresó que empresas como las empacadoras de carne poseen presas en arroyos y corrientes naturales y de ahí satisfacen sus necesidades de agua demostrando la factibilidad de la cosecha de agua.
Finalmente el alcalde de San Vicente dijo que es el momento de tomar decisiones impostergables pues la crisis del agua es tan dramática que hay tramos del río Moctezuma entre San Vícente y el Higo Veracruz que se pueden cruzar caminando por la pérdida de aforo.
No es alarmismo pero de seguir así las profecías sobre las guerras por el agua se cumplirán fatalmente, refirió.
