Miguel Ángel Guerrero Arriaga
Septiembre 22, 2020
De no atender el llamado de alerta en el sentido de que puede registrarse un rebrote del coronavirus en el estado, ya podríamos empezar a resignarnos a presenciar una mortandad masiva y a un contagio generalizado de la pandemia en caso de no atender las elementales medidas sanitarias como el uso del cubrebocas mantener la sana distancia y no salir de casa si no es estrictamente necesario.
Lo que parece ser la última llamada para conservar la salud y la vida la hizo este martes la secretaria estatal de salud Mónica Liliana Rangel durante su conferencia para informar sobre la evolución de la pandemia cuando nos encontramos en una racha de tres semanas en que se registran menos de 200 casos positivos luego de que en el pico más elevado se llegó a pasar los 400.
La funcionaria no dudó en advertir que, de continuar el relajamiento de la atención a las medidas sanitarias tenga lugar un rebrote de la enfermedad, como está ocurriendo, y temiendo, en varios países europeos.
Desde luego, no está muy lejos de que su temor llegue a concretarse, habida cuenta la persistente despreocupación de miles de potosinos por protegerse del contagio al andar por la calle sin la protección necesaria como también notoriamente, los fines de semana es mucha la gente que se expone al realizar fiestas y reuniones en sus casas sin respetare la sana distancia o llevar cubrebocas de lo que cínicamente dan cuenta al subir a las redes sociales fotografías de su irresponsabilidad.
Así entonces, un eventual rebrote lógicamente, vendría a echar por tierra el resultado de los esfuerzos realizados a lo largo de los seis meses que tiene la pandemia en SLP con los que se logró cerrar el paso al disparo de la letalidad y de víctimas fatales hasta llegar a la fase actual de propagación relativamente en descenso que ha permitido la reapertura de diversas actividades productivas y alentar el optimismo de alcanzar la meta de eliminar casi todas las prohibiciones si se acumulan méritos como para obtener el color verde del semáforo epidemiológico aunque contradictoriamente el relajamiento no ha colocado al borde del precipicio de la pandemia por el que nos despeñaremos si no hacemos caso a esa última llamada para conservar la salud y la vida.
CABOS SUELTOS
Por cierto, por el peligro de que se acelere la propagación del Covid- 19 el diputado Eugenio Govea Arcos volvió a insistir en que se multe en todos los municipios del estado a quienes no usen el cubrebocas, lo que bien debería considerarse en atención a la necedad de muchos de no portarlo para ver si así entienden y respetan la medida.