Toño Martínez
Abril 26, 2020
LA BUENA: Se puede afirmar con toda certeza que los habitantes de la Huasteca y parte de la Zona Media como de gran parte del país somos afortunados porque el calor que nos atormenta despiadadamente la mayor parte del año se convierte de pronto en un gran aliado para disminuir el ataque del Coronavirus. Como se dice en términos coloquiales, nos pega menos.
¿Alentador verdad? Una explicación científica sencilla para entender mejor cómo afecta el calor generado por la radiación solar o sea los Rayos UV al COVID19.
El virus no es capaz de reproducirse solo. Utiliza entonces a las células para inyectarles su ADN y ARN que es su material genético. Unos quedan dentro pero otros se fusionan a la célula y salen multiplicándose aceleradamente con su carga destructiva para los humanos.
Bueno, pues los Rayos UV de acuerdo con las investigaciones de expertos de Estados Unidos, Francia, Canadá y ahora de la Universidad Nacional Autónoma de México, lo que hacen es destruir las cargas genéticas del virus, lo neutralizan e inactivan.
A eso se debe que el virus avance muy rápido en regiones frías y poco en las cálidas como es la nuestra. Es un antiviral natural.
LA MALA: Haber iniciado tarde las medidas de prevención en el país contra el COVID por la absurda política del presidente Andrés Manuel López Obrador del «no pasa nada»… «besos y abrazos»..,»detente enemigo» y toda es sarta de sandeces irresponsables y temerarias para el guía de un país, permitió que la pandemia se propagara y por desgracia ya llevamos en México 1,305 fallecidos y 14,842 enfermos confirmados; en nuestro estado el número de víctimas fatales se conservaba en 7 hasta este domingo y 85 contagiados. Pero no es todo; falta lo peor.
Víctor Velazco Herrera, geofísico de la UNAM – contrario a la perorata de López Obrador de que «estamos saliendo del túnel» advirtió que de continuar con la tendencia actual el pico más alto de contagios se espera para las primeras dos semanas de Mayo y, agárrese, viene una segunda oleada de expansión del Coronavirus para la semana 30 del año, o sea la última de julio, cuando el clima comience a cambiar y haya lluvias favoreciendo que se extienda nuevamente.
¿Qué hacer?
No nos confiemos en que el calor nos salvara; sirve sí, pero más de las recomendaciones del sector salud como son la sana distancia, cubre bocas, lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, aliméntese bien, haga ejercicio y si no tiene nada que hacer en la calle, pues no salga. El enemigo acecha.