Miguel Ángel Guerrero Arriaga
Noviembre 15, 2020
Un terrible regalo navideño podrían traer los los paisanos que trabajan o radican en los Estados Unidos en la tradicional visita que hacen a sus familiares que residen en SLP durante la temporada de fin de año toda vez que podrían venir contagiados del coronavirus con el riesgo de transmitírselo a la gente que los reciba.
La oleada de potosinos procedentes de los EU obviamente vendrán sin la seguridad de no portar el virus pues aún no se aplica la vacuna contra dicha enfermedad y peor porque vienen del país con más casos positivos en el mundo y uno con la mayor letalidad del planeta.
Como se recuerda durante la temporada vacacional de semana santa que tuvo lugar el mes de abril que también generó una avalancha de paisanos que trabajan en el vecino país del norte que no se pudo contener ni controlar sanitariamente hablando, un mes después de que se detectara el primer caso en el estado y se impusiera el aislamiento social así como la política de no salir de casa sin motivo importante y se empezara a demandar el uso del cubrebocas.
Esa visita en masa del paisanaje se trató de controlar con llamados a que se revisaran antes de venir a su tierra hasta se dispusieron revisiones aleatorias de viajeros para checar su temperatura o ver si no presentaban síntomas lo que no fue suficiente toda vez que en ese mes y el siguiente se detectaron altos registros de casos positivos en municipios como Cerritos, Matehuala y Tamazunchale, entre otros, fenómeno que podría repetirse de no aplicarse un efectivo dispositivo de vigilancia y concientización entre las familias que recibirán visitas de paisanos que vienen de los Estados Unidos, lo mismo para que las posterguen o les pidan que guarden el aislamiento social necesario que garantice que no son portadores del virus pues cuentan con el convincente argumento de que podrían ponerlos en peligro de muerte de no someterse a la cuarentena obligada lo que será difícil que lo hagan en virtud de que la mayoría de las familias que tiene miembros en el país vecino legítimamente espera verlos.
Asimismo, para las autoridades sería bastante complicado controlar su arribo al estado tanto como revisar las condiciones de salud en que llegan aunque algo se podría lograr haciendo lo que se ha impuesto en el acceso a los centros comerciales donde checan la temperatura corporal al ingresar las personas como podría hacerse en las entradas de los municipios detectados con mayor expulsión de gente a los EU y que registran más visitas de fin de año a sus familias pero debe hacerse para que no vengan cargando como regalo a su gente el mortal contagio del covid- 19, de otro modo estaríamos en riesgo de sufrir un rebrote de la pandemia que haría perder lo ganado en su combate aquí.
