El conflicto legal que involucra a varios ejidos podría generar violencia.
Por: Jorge Ascanio Ruiz
Derivado de un litigio considerado inadecuado por las autoridades ejidales, 20 mil hectáreas ricas en ganadería de especies menores y en agricultura diversa, así como la zona urbana están en riesgo de pasar a manos de particulares que apoyados por litigantes y políticos de la región estarían despojando a más de 650 ejidatarios que viven de las oportunidades del campo en la zona media.
Las autoridades Ejidales y acreditadas del ejido progreso Víctor Miranda, Adrián Gudiño y Nereyda Martínez, han externado su preocupación por el proceso legal considerado ventajoso y amañado que fue llevado a cabo en juzgados del Fuero Común, la familia Jordán Gerardo a través de un juicio sucesorio intestamentario se adjudicó 20 mil hectáreas afectando al ejido y ejidos circunvecinos, dijeron que esas personas utilizan un aparente documento que habla de una contrato de compraventa en su favor, actuación que no comprueba su legalidad y podría carecer de validez oficial.
Los representantes legales del ejido Progreso, han señalado que la familia Jordán Gerardo, en voz de su representante Cynthia Jordán Gerardo, intenta sorprender y confundir a ejidatarios, campesinos y residentes de la zona, así como a las autoridades de juzgados federales, queriendo justificar que solamente están recuperando cascos de hacienda sin afectar al campo productivo, situación totalmente falsa toda vez que progreso solo tiene por dotación aproximadamente 14 mil hectáreas.
Declararon las autoridades ejidales que los actos que realizan como representantes del núcleo ejidal progreso, son auténticos y apegados a derecho en defensa de su dotación presidencial, añadieron que como grupo ejidal unido trabajarán para salvaguardar el patrimonio de los 650 ejidatarios y sus familias a la vez se mantendrá la defensa legal y honesta de sus tierras, aún y cuando existe la amenaza de generar violencia en contra de las autoridades ejidales y su asesora derivado de las constantes amenazas que realiza Cynthia Jordán Gerardo y su familia en contra de quién se oponga a su intención de despojo, por tal efecto hacen responsable a la familia Jordán Gerardo de cualquier acción criminal que pueda surgir en la región en contra de quien defiende el patrimonio ejidal de Progreso.
