Filiberto Juárez Córdoba
EL CONFLICTO de la Normal del Estado tiene matices e implicaciones que van más allá de lo meramente académico y rebasan el contexto institucional de una entidad pública centenaria. Más que el fondo, lo que hay detrás del problema son las formas. Se ha dicho que la rebelión es por el cambio de director, pero que el director del Sistema Educativo Estatal Regular, tiene facultades para nombrar y remover a los directores de sus escuelas, por lo que la remoción de Francisco Hernández Ortiz y el nombramiento de Juan Manuel Guel Rodríguez, fueron legales. Sin embargo hay quienes dicen que al no hacerse conforme a los procesos establecidos pierden legitimidad. Hay un antecedente que debe tomarse en cuenta, en octubre del 2021, el entonces director del SEER, Juan Carlos Torres Cedillo, tomó protesta a Nadya Edith Rangel Zavala, como nueva directora de la BECENE, en sustitución de Francisco Hernández Ortiz. La sustitución se hizo sin contratiempos. Un año después, en noviembre del 2022, por una serie de problemas internos que no pudo solucionar, fue removida y nuevamente se le encomendó la dirección a Francisco Hernández Ortiz. Con los asegunes correspondientes, Hernández Ortiz, colocó a la BECENE en buenos niveles de reconocimiento. Fue aceptada en la Asociación Nacional de Universidades e Institutos de Educación Superior (ANUIES) y obtuvo el primer lugar nacional en la evaluación del Programa de Fortalecimiento de la Educación Normal, (PROFEN) 2025, según anunció la Dirección General de Educación Superior para el Magisterio (DGESuM).
PARECE ENTONCES inexplicable que se haya tomado la decisión de cambiar de director. Ahí es donde aparece otro de los matices, el actual director del SEER, Martín Rodríguez Ramírez, fue dirigente de la Sección 52 del SNTE. Al concluir su período, impulsó a una de las candidatas a sucederlo pero la actual dirigente, Elizabeth Viviana Guerrero Milán, fue la que ganó. Martín Rodríguez, dejó de ser el representante sindical de los trabajadores pero, por una extraña decisión de la SEGE, fue nombrado director del SEER, pasó a ser la parte patronal. En lugar de llevar la fiesta en paz buscando acuerdos y conciliación con la dirigencia sindical, empieza, dicen, a tomar represalias contra los que presuntamente no apoyaron su proyecto sucesorio y no están de acuerdo con los compromisos que ha hecho y en los que trata de involucrar al personal del SEER. El control de la Normal, es parte de esa dinámica.LO QUE REULTA poco razonable es el momento en que toma la decisión de cambiar de director de la BECENE. Está culminando el proceso de titulación de los egresados y el cambio de dirección implica el cambio de firmas. Las firmas que llevan los títulos deben estar registradas en varias dependencias federales, para la validez oficial y expedición de las cédulas profesionales, proceso que lleva tiempo. Para participar en los mecanismos de asignación de plazas, los egresados, necesitan lo antes posible la documentación con las formalidades debidas. Para todo hay tiempo y modo, se dijo al inicio del conflicto, y la propuesta más congruente era que se dejara en el cargo a Francisco Hernández Ortiz, hasta que concluyera el proceso de fin de cursos y titulación, 3 o 4 semanas, y luego se hiciera el nombramiento del nuevo director y la entrega recepción correspondiente. Cuando parecía que eso destrabaría la controversia, incluso trascendió que el secretario de Educación ya había aceptado, se dio marcha atrás y todo quedó entrampado.
OTRO DE LOS MATICES que le mete ruido al asunto, es que el día del sorpresivo nombramiento, hubo una manta de felicitación al nuevo director y un mariachi que le dio la bienvenida. La cortesía fue por cuenta, según los logotipos de la manta, de la Asociación de Estudiantes Normalistas Potosinos. Eso provocó una división entre el estudiantado, porque el de la iniciativa de manifestar el apoyo sí forma parte de la AENP, pero no la preside ni tomó en cuenta a sus compañeros de la dirigencia, apoyar a Juan Manuel Guel Rodríguez, fue una decisión personal debido a que es su hermano.
MUCHOS MATICES hay que deben comentarse ampliamente, pero si en el matiz político se trata de demostrar control, fuerza y poder, funcionarios como los del SEER, más que ayudar a quien pretenden ayudar, están creando frentes innecesarios y unificando los diferentes grupos magisteriales en su contra. Lo que resulta totalmente contrario a sus fines. NOSOTROS DECIMOS:
Con ese operar tan pobre,
Se dijo en ciertos comentarios,
En educación hay funcionarios
¡Que solo enseñan el cobre!
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X @FJuarezC
